De traidores y de infames 

 Jelipe

#LaCuartaTransformaciónVa

                                                         De traidores y de infames

                                                                          Jelipe

Inclinado al alcohol desde muy joven, Felipe tuvo sueños grandes, mitad realidad, mitad borrachera, que lo impulsaron a buscar las formas rápidas que permitieran alcanzar fama y fortuna.

Desde el inicio dio muestras de una especial cualidad para conquistar sus metas. Carecía totalmente de escrúpulos. Sabía granjearse el favor de la gente, sacar provecho a toda relación, para abandonar después a quienes le tendieron la mano, en alguna etapa del camino.

Porque Felipe traicionaba cuando era necesario, faltaba a su palabra con demasiada frecuencia y prometía permanentemente lo que no tenía intención de cumplir.

Con el tiempo, Felipe alcanzo la fama, el dinero y la posición de poder con que soñaba. Fue cacique de pueblo, autoridad máxima, dueño de vidas y responsable de incontables muertes.

Su único amigo conocido, fue el alcohol, al que guardaba consideración y respeto especial. Solo un bebedor asiduo puede entender el tipo de relación que se va tejiendo entre el vaso bien servido y la boca ávida que busca alcanzarlo.

En el pueblo, "Jelipe", como lo llamaban muchos, era considerado un desgraciado, como dice la canción.

Pero no desgraciado por las penas que hubiera sufrido. En realidad, él fue la causa de infinidad de desgracias familiares. Muertos, desaparecidos, desposeídos.

Fue una de las peores autoridades que se recuerden.

Jelipe fue un desgraciado, fue el estribillo que le dedicaron muchos de los ofendidos que dejó a su paso.

Su gobierno acabó, pero no su ambición de poder. Mentiroso consumado, intentó recuperar el cargo después de algún tiempo. Pagó para que se hablara bien de él y de su etapa de gobierno. Pero solo otros borrachos y algunos despistados se tragaron el cuento.

Nunca volverá a ser autoridad.

Hoy Felipe es lo que en realidad fue siempre. Un borracho, hoy más viejo, con grandes sueños. Tuvo la oportunidad de realizar sus fantasías, pero el alcohol y la infamia, fueron más fuertes en él. Regresa al origen de todo, con las manos vacías.

De: Malthus Gamba